¿Abaratan costes realmente las energías renovables o nos salen más caras de lo que pensamos? En cuestión de medioambiente los beneficios son innegables pero ¿y económicamente hablando? Eficiencia-V es, probablemente, la empresa con mejor relación calidad precio a nivel español en la instalación y mantenimiento de energías renovables, trabajan tanto a nivel particular como para empresas y ponen la mano en el fuego tanto por el ahorro económico como por el beneficio medioambiental pero, ¿qué piensan los expertos?
En un artículo que María Concepción Cánovas del Castillo escribió para 20minutos encontramos respuestas a muchas de estas preguntas.
La calificación de un producto como “caro o barato” se basa en su comparación con productos de características similares; de ahí que nos tengamos que preguntar su tienen sentido afirmaciones como que “la energía nuclear es más barata que la energía renovable”. Hablamos de dos productos totalmente diferentes. Puede que ambas sean energías pero nada tiene que ver la una con la otra. Si comparamos el precio de la energía eólica con la fotovoltaica puede que podamos obtener parámetros que nos digan cuál de las dos es más rentable porque ambas energías hablan el mismo idioma.
¿Cuáles han de ser los criterios que permitan comparar los costes de generación de tecnologías como la solar o la eólica, cuya producción de electricidad está exenta de emisiones y residuos, con respecto a la tecnología como la nuclear cuyos residuos de alto nivel radioactivo será necesario gestionar y vigilar durante miles de años y para los que a día de hoy, después de cincuenta años generando este tipo de desechos radioactivos, no se dispone de almacenamiento definitivo?
Sin entrar a valorar la insolidaridad generacional que conlleva el uso de la energía nuclear, la valoración de sus costes es imposible de precisar como bien reconocía el Gobierno en el preámbulo de la Ley 15/2012 de medidas fiscales para la sostenibilidad energética, por lo que difícilmente puede aceptarse la comparación de los costes de generación de ambas tecnologías.
Lo que sí podemos afirmar es que los costes de la energía fotovoltaica se ha reducido en un 80% en los últimos cinco años y ¿eso qué significa? Pues que al igual que para con todo, cuando algo nuevo se inicia conlleva muchísimo gasto ponerlo en marcha y eso encarece el producto final pero cuando ya viene rodado éste se abarata notablemente.
La respuesta es sí
En definitiva, el coste de la energía renovable, que ya es competitivo respecto a la energía convencional en la actualidad, lo será cada vez más en el futuro. Si a esto le añadimos su capacidad para generar riqueza y actuar como locomotora industrial y tecnológica en la economía y creación de empleo, queda más que justificada la creciente apuesta de la sociedad, tanto a nivel personal como corporativo, para acelerar la penetración de las energías renovables en el modelo energético.
El ejemplo lo tenemos en las grandes compañías multinacionales que tras estudiar el tema y observar los resultados de dichos estudios, “Apple” y “Google” se plantean como objetivo que todas sus instalaciones funcionen a base de energías 100% limpias y renovables, tendencia que cada vez en mayor medida seguirán otras muchas empresas.
Así que ante todo esto, y en respuesta a la pregunta inicial: sí, merece la pena a nivel industrial pasarse a las energías renovables, tanto a nivel económico como medioambiental.