Ahora que la tecnología ha avanzado tanto, permitiéndonos convertir el sueño de los robots en una realidad palpable, serán cada vez más las personas y las empresas que los incluyan en sus tareas diarias hasta el punto de comenzar a depender de ellos, como dependemos de otros avances tecnológicos, programas y aplicaciones. Así, los robots terminarán añadiendo infinitas posibilidades a cómo nos movemos, qué construimos y dónde, e incluso a los materiales que usamos para crear cosas; convirtiéndose en nuestro apoyo para la realización de una infinidad de tareas.
De hecho, ya nos podemos ir imaginando un futuro en el que los robots estén tan integrados en el día a día de la vida humana que sean tan habituales como los teléfonos inteligentes. El campo de la robótica podría mejorar enormemente nuestra calidad de vida en los ámbitos laboral y doméstico, y también en nuestro tiempo de ocio, proporcionándonos apoyo tanto en labores cognitivas como físicas. Incluso, los robots llevan años ayudando a los seres humanos a realizar tareas peligrosas, desagradables o tediosas, y han permitido explorar entornos de difícil acceso, entre ellos las profundidades marinas o el espacio exterior. Por lo mismo, se espera que cada vez hayan más robots capaces de adaptarse y de aprender e interactuar cognitivamente con los seres humanos y con otras máquinas, incluso desarrollando emociones y sentidos como el tacto, y volviéndose lo más cercano posible a un humano.
Los rápidos avances tecnológicos de la pasada década han convertido la informática en algo indispensable que ha transformado nuestra forma de trabajar, vivir y jugar. La digitalización de casi todo, unida a los avances en robótica, nos promete un futuro en el que tengamos acceso a máquinas muy complejas. Por ejemplo, la capacidad de los robots va en aumento, ya que hoy en día estos pueden llevar a cabo cálculos más difíciles y relacionarse con el mundo mediante sensores cada vez más precisos y activadores de mejor calidad. En la actualidad se han estado desarrollando robots con un sentido del tacto casi humano y que pueden replicar ciertas emociones a niveles muy naturales para poder entenderse con el usuario.
Nuestro mundo conectado, con muchos robots personalizados que trabajan junto a las personas, ya está creando nuevos empleos, mejorando la calidad de los existentes y ahorrándole a la gente tiempo para que pueda dedicarse a lo que considera interesante, importante y estimulante. Los robots ya son nuestros colaboradores en entornos industriales y domésticos. Cooperan con los seres humanos en fábricas y quirófanos. Nos cortan el césped, aspiran el suelo e incluso ordeñan nuestras vacas.
Los diferentes trabajos de los robots
Los robots ya están teniendo una incidencia muy importante en los procesos de fabricación de los sectores del automóvil y la electrónica. También se usan cada vez más en agricultura, minería, transporte, exploración espacial y marítima, sistemas de vigilancia no tripulada, salud, educación y muchos otros campos.
Estos pueden aumentar la productividad laboral, reducir los costos de producción y mejorar la calidad del producto. Además, en el sector servicios han generado incluso modelos operativos completamente nuevos. Los robots también contribuyen al bienestar humano eliminando la necesidad de realizar trabajos pesados y peligrosos, ayudando a una población envejecida y convirtiendo en realidad el transporte sostenible.
Así, estos se han vuelto tan útiles que su producción, incluyendo el coste de los programas informáticos que estos necesitan, crecerá hasta alcanzar aproximadamente los 33.000 millones de dólares de los EE.UU, siendo Asia (concretamente China, la República de Corea y el Japón) la que se posiciona como líder mundial en ventas en el sector de la robótica; seguida por Europa y América del Norte.
Por supuesto, dicha inversión se recupera fácilmente con los beneficios económicos obtenidos del uso de robots, que en su mayoría vienen directamente relacionados con la sustitución parcial de la fuerza de trabajo. Y es que las mejoras de productividad generadas por los robots ayudan a las empresas a seguir siendo competitivas y a crear puestos de trabajo con salarios más elevados en determinados países.
Innovaciones en robótica
La innovación en materia de robótica se concentra en un número reducido de países y polos surgidos por lo general en torno a las universidades más avanzadas, como en el caso de Boston (Estados Unidos), la île-de-France (Francia), Odense (Dinamarca), Zúrich (Suiza), Bucheon (República de Corea), Osaka (Japón) y Shanghai (China).
Dichos polos prosperan gracias a la investigación pública y la privada, y la comercialización de los resultados de la investigación a largo plazo llevada a cabo en universidades y otras instituciones públicas de investigación.
La mayor parte de la innovación y las empresas emergentes ligadas a la robótica se encuentran en países de altos ingresos, a excepción de China, que alberga algunas de las empresas de robótica que más rápido están creciendo, tales como DJI (una empresa de drones), Siasun y Estun.
El trabajo de innovación en el ámbito de la robótica es muy dinámico y colaborativo, exige un intenso proceso de investigación y resulta cada vez más complejo en su afán de crear más y nuevas funcionalidades. Son muchos los especialistas, instituciones de investigación y pequeñas y grandes empresas con un elevado coeficiente tecnológico que trabajan en pro de nuevos resultados. Así, se logra unir los conocimientos y la experiencia procedentes de diversas disciplinas para ofrecer invenciones innovadoras basadas en los últimos avances en ciencias de los materiales, energía motriz, sistemas de control, sensores e informática.
Por supuesto, como los trabajos que se requieren para poder avanzar en el mundo de la robótica son bastante desafiantes. Muchas veces las organizaciones que se avocan a ellos necesitan establecer colaboraciones con otras empresas o profesionales que cuenten con la pericia necesaria para llevarlos a cabo, celebrando por ejemplo acuerdos conjuntos de desarrollo con empresas especializadas en robótica.
La robótica industrial requiere fuertes inversiones y pueden pasar años hasta que la investigación dé sus frutos, sin embargo las empresas especializadas en materia y las universidades le encuentran el valor necesario a apostar por ello.
Empresas consolidadas más grandes, como ABB (Suiza), Kawasaki Heavy Industries, Yaskawa y Fanuc (Japón) y KUKA (Alemania) son también muy activas en I+D en materia de robótica. Grandes empresas de seguridad, de defensa y de tecnología aeroespacial también han adquirido experiencia en robótica, al igual que empresas dedicadas a la electrónica de consumo como Samsung (República de Corea) y Dyson (Reino Unido).
Por otra parte, a medida que la robótica se vuelve más dependiente de la conectividad y de las redes TIC, empresas como Amazon, Google, Facebook, Infosys, Alibaba y Foxconn también se están sumando al desarrollo de las investigaciones.
En conclusión que ahora son muchas las empresas procedentes de muchos sectores que están empezando a darse cuenta de los beneficios de la robótica, la cual ocupa un papel cada vez más central en las estrategias empresariales.
Los especialistas en ingeniería y robótica industrial de Indago, nos presentan los últimos resultados del campo:
· Implementación de IA en la robótica
En este punto nos referimos al desarrollo de la inteligencia artificial, la cual forma una parte fundamental en el crecimiento y la innovación de la robótica, y la cual es pieza clave en muchos de los logros en materia que se han presentado los últimos años. Por ejemplo, el último avance en materia fue Neon, del cual Samsung afirma que se “comporta como una persona de verdad, con capacidad de mostrar emociones e inteligencia”.
Por otro lado, PowerVision Robot Coporation le sigue los pasos muy cerca al presentar algunos de sus productos más novedosos, relacionados con drones inteligentes, realidad virtual, realidad aumentada y claro está, inteligencia artificial.
Mientras que, finalmente, también tenemos la PowerEgg X, una cámara todo en uno, poseedora de inteligencia artificial y que incluso se puede utilizar como un dron. Se trata de un dispositivo fácil de usar, versátil y portátil, el cual cuenta con una videocámara de 4K a 60 FPS, permitiendo lograr imágenes con impresionante calidad, ya sea que se utilice como cámara inteligente, cámara de mano, o como un dron para filmar sorprendentes escenas o tomar impactantes imágenes desde el aire.
Incluso, la Inteligencia Artificial está revolucionando las relaciones de los humanos con los materiales. Entre otros usos, se está utilizando para desarrollar nuevos materiales para tecnologías “limpias” tales como paneles solares, baterías, etc.
· Dispositivos inteligentes destinados al soporte
Por supuesto, las empresas y universidades no solo trabajan por llegar a resultados en el área del ocio, más bien sus mayores esfuerzos se destinan al soporte de la humanidad, como por ejemplo en el caso de los robots destinados a preservar especies marinas, exploración de arrecifes o incluso del espacio exterior.
Aquí, un campo muy importante es el soporte médico, que ya cuenta con manos robóticas impresas en 3D, las cuales funciona mediante 5G y permiten realizar operaciones quirúrgicas o procedimientos médicos a distancia. Además de robots destinados al cuidado y recuperación de las personas en estado de atención, e incluso dispositivos que mejorarán el diagnóstico médico para lograr un mayor porcentaje de éxito durante los tratamientos.
Por otro lado, la tecnología cuántica hace de las suyas en el mundo de los fármacos. Los químicos y farmacéuticos realizan sus diseños en base a las propiedades moleculares y deben sintetizar numerosas variables para testar sus medicamentos y predicciones, por lo que la computación cuántica está buscando transformar este proceso engorroso y costoso, permitiendo realizar numerosos diseños en paralelo que podrán ser testeados gracias al uso de la misma.